El complejo facilitará el estudio de males como el de las 'vacas locas' y potenciará la investigación al más alto nivel internacional
Ubicado en el hospital de Txagorritxu, dispone de los últimos avances en neurociencia
Txagorritxu dispone ya de un importante avance en el campo de la neurociencia y la investigación: el primer banco hospitalario de cerebros de Euskadi, que está integrado en un sistema de tele-patología que permite a los profesionales ubicados en distintas localidades o países la observación simultánea de la misma muestra biológica. El centro sanitario de Vitoria inauguró ayer las instalaciones. Alberga el denominado nodo del 'biobanco', dividido en otros tres 'almacenes': uno de ADN depositario de sangre y sueros, otro de tejidos tumorales y otro de cerebros. En este último se conservan 67 de estos órganos, procedentes de personas fallecidas en Euskadi por encefalopatías espongiformes visibles humanas -el mal de las 'vacas locas'-, un ámbito en el que Txagorritxu se ha especializado en la última década.
La unidad implantada en la capital alavesa forma parte una red de diez bases existentes en los hospitales de Basurto, Cruces, Galdakao-Usansolo, Santiago y Donostia; en la Policlínica Guipúzcoa; en el Centro vasco de Transfusiones y Tejidos; en el Instituto Oncológico y en el Departamento de Sanidad. Estos centros interconectados entre sí forman el Biobanco Vasco para la Investigación, también designado O+Ehun. Su estructura permite la recogida de muestras, su procesamiento y almacenaje en los propios hospitales. También será posible su cesión. Asimismo, esta 'tela de araña' permite saber cuántas muestras de unas determinadas características hay y dónde se encuentran, lo que facilita la labor investigadora.
Los 200 metros cuadrados que ocupan el nuevo espacio de Txagorritxu han supuesto una inversión global de 1,3 millones de euros, financiados por Osakidetza, el Ministerio de Educación y Ciencia, el Instituto Carlos III y la Fundación Vasca de Innovación e Investigación Sanitarias. Antes de poner en marcha el proyecto, el hospital ha ido conservando las muestras de los cerebros en el Servicio de Anatomía Patológica en condiciones distintas a las actuales. «Desde hace una década somos referencia a nivel de Euskadi en el estudio de las encefalopatías espongiformes transmisibles humanas», valoró Francisco Villar, director gerente del centro vitoriano, que visitó las instalaciones junto al consejero de Sanidad, Rafael Bengoa.
En total, la actividad que se desarrolla en los hospitales de Txagorritxu y Santiago de Vitoria «representa el 12% de toda la investigación pública competitiva de la Sanidad vasca y el 20% de la investigación contratada por la industria farmacéutica en Osakidetza».
El adelanto tecnológico y médico es más que evidente, pero ¿cómo repercute a la ciudadanía este nuevo centro? «Es una oportunidad para que los profesionales que atienden a esos pacientes también puedan investigar. Se trata de tener un espacio donde los médicos puedan llevar a cabo sus trabajos con la colaboración de los pacientes, ya que la mayoría de estos análisis y la información provienen generalmente del extranjero», aclaró Isabel Guerra, jefa del servicio de Anatomía Patológica y coordinadora del 'biobanco' y el laboratorio. Las nuevas instalaciones acercan la investigación a la asistencia, «donde es posible analizar cualquier órgano».
Equipos punteros
Este avance vislumbra «la manifestación de estructuras hospitalarias de primer nivel, y supone la puesta de largo de varios equipos de investigación que son punteros tanto en la Comunidad Autónoma Vasca como en España», destacó la viceconsejera de Innovación e Investigación Sanitaria, Olga Rivera, que apostó por «situar estas instalaciones en el futuro en el mapa de la investigación nacional y comunitaria».
El banco de cerebros de la capital alavesa deposita los órganos de pacientes fallecidos en el hospital y de quienes mueren en Euskadi por consecuencia del mal de las 'vacas locas'. También dispone de un área de crioconservación formada por arcones congeladores e incluye equipamiento específico para la extracción de ADN y una sala para el cultivo de células. Al igual que el resto de unidades del Biobanco vasco, está dotado con un sistema que posibilita investigar la imagen de una muestra desde distintas ciudades.
Las instalaciones, según detalló Isabel Guerra, «se encuentran en una situación estratégica que ofrece las mejores condiciones para obtener muestras biológicas y almacenarlas». Respecto al nuevo laboratorio, Villar subrayó que «constituye un motor para la investigación de excelencia», y su objetivo es ofrecer un espacio idóneo para que profesionales del ámbito de la medicina, enfermería, biología y farmacia puedan desarrollar su actividad investigadora con los mejores equipamientos posibles. El laboratorio alberga instrumentos de tecnología punta en biología molecular y genética, «herramientas imprescindibles en la investigación transnacional».
http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/20091215/pvasco-espana/nuevo-banco-cerebros-euskadi-20091215.html
Ubicado en el hospital de Txagorritxu, dispone de los últimos avances en neurociencia
Txagorritxu dispone ya de un importante avance en el campo de la neurociencia y la investigación: el primer banco hospitalario de cerebros de Euskadi, que está integrado en un sistema de tele-patología que permite a los profesionales ubicados en distintas localidades o países la observación simultánea de la misma muestra biológica. El centro sanitario de Vitoria inauguró ayer las instalaciones. Alberga el denominado nodo del 'biobanco', dividido en otros tres 'almacenes': uno de ADN depositario de sangre y sueros, otro de tejidos tumorales y otro de cerebros. En este último se conservan 67 de estos órganos, procedentes de personas fallecidas en Euskadi por encefalopatías espongiformes visibles humanas -el mal de las 'vacas locas'-, un ámbito en el que Txagorritxu se ha especializado en la última década.
La unidad implantada en la capital alavesa forma parte una red de diez bases existentes en los hospitales de Basurto, Cruces, Galdakao-Usansolo, Santiago y Donostia; en la Policlínica Guipúzcoa; en el Centro vasco de Transfusiones y Tejidos; en el Instituto Oncológico y en el Departamento de Sanidad. Estos centros interconectados entre sí forman el Biobanco Vasco para la Investigación, también designado O+Ehun. Su estructura permite la recogida de muestras, su procesamiento y almacenaje en los propios hospitales. También será posible su cesión. Asimismo, esta 'tela de araña' permite saber cuántas muestras de unas determinadas características hay y dónde se encuentran, lo que facilita la labor investigadora.
Los 200 metros cuadrados que ocupan el nuevo espacio de Txagorritxu han supuesto una inversión global de 1,3 millones de euros, financiados por Osakidetza, el Ministerio de Educación y Ciencia, el Instituto Carlos III y la Fundación Vasca de Innovación e Investigación Sanitarias. Antes de poner en marcha el proyecto, el hospital ha ido conservando las muestras de los cerebros en el Servicio de Anatomía Patológica en condiciones distintas a las actuales. «Desde hace una década somos referencia a nivel de Euskadi en el estudio de las encefalopatías espongiformes transmisibles humanas», valoró Francisco Villar, director gerente del centro vitoriano, que visitó las instalaciones junto al consejero de Sanidad, Rafael Bengoa.
En total, la actividad que se desarrolla en los hospitales de Txagorritxu y Santiago de Vitoria «representa el 12% de toda la investigación pública competitiva de la Sanidad vasca y el 20% de la investigación contratada por la industria farmacéutica en Osakidetza».
El adelanto tecnológico y médico es más que evidente, pero ¿cómo repercute a la ciudadanía este nuevo centro? «Es una oportunidad para que los profesionales que atienden a esos pacientes también puedan investigar. Se trata de tener un espacio donde los médicos puedan llevar a cabo sus trabajos con la colaboración de los pacientes, ya que la mayoría de estos análisis y la información provienen generalmente del extranjero», aclaró Isabel Guerra, jefa del servicio de Anatomía Patológica y coordinadora del 'biobanco' y el laboratorio. Las nuevas instalaciones acercan la investigación a la asistencia, «donde es posible analizar cualquier órgano».
Equipos punteros
Este avance vislumbra «la manifestación de estructuras hospitalarias de primer nivel, y supone la puesta de largo de varios equipos de investigación que son punteros tanto en la Comunidad Autónoma Vasca como en España», destacó la viceconsejera de Innovación e Investigación Sanitaria, Olga Rivera, que apostó por «situar estas instalaciones en el futuro en el mapa de la investigación nacional y comunitaria».
El banco de cerebros de la capital alavesa deposita los órganos de pacientes fallecidos en el hospital y de quienes mueren en Euskadi por consecuencia del mal de las 'vacas locas'. También dispone de un área de crioconservación formada por arcones congeladores e incluye equipamiento específico para la extracción de ADN y una sala para el cultivo de células. Al igual que el resto de unidades del Biobanco vasco, está dotado con un sistema que posibilita investigar la imagen de una muestra desde distintas ciudades.
Las instalaciones, según detalló Isabel Guerra, «se encuentran en una situación estratégica que ofrece las mejores condiciones para obtener muestras biológicas y almacenarlas». Respecto al nuevo laboratorio, Villar subrayó que «constituye un motor para la investigación de excelencia», y su objetivo es ofrecer un espacio idóneo para que profesionales del ámbito de la medicina, enfermería, biología y farmacia puedan desarrollar su actividad investigadora con los mejores equipamientos posibles. El laboratorio alberga instrumentos de tecnología punta en biología molecular y genética, «herramientas imprescindibles en la investigación transnacional».
http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/20091215/pvasco-espana/nuevo-banco-cerebros-euskadi-20091215.html
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